Por: Mauricio Aira
En muchos aspectos Suecia ha sido pionera, como en situar a la mujer en tareas similares a las de los hombres, en los talleres, las fábricas, las oficinas y desde hace relativamente poco en los puestos gerenciales de la empresa pública y privada. Los resultados no se han dejado esperar.
En la estructura ministerial existe un responsable de los temas de igualdad, en el gabinete actual de los partidos llamados burgueses integrado por conservadores, liberales, centristas y demócratacristianos se ha colocado por la primera vez en la historia del Reino a una mujer de color Nyamko Sabuni de orígen africano. Nyamko como los otros ministros y jefes políticos tiene opción a escribir artículos relacionados con los asuntos de su preocupación y que los medios publican (ojalá en Bolivia cundiera el ejemplo)si bien en forma discreta y limitada. La ministra ha recomendado al empresariado a colocar a la mujer en los puestos de dirección, siguiendo el ejemplo de lo que ha venido haciendo el Gobierno en el sector público.
Sabuni ha expresado su satisfacción porque la igualdad de género en el mercado de trabajo ha mejorado mucho, se puede decir que son tantas las mujeres como los varones en puestos productivos y de servicio como nunca antes. Los sectores tradicionales bajo dominio de los hombres, se han quebrado, por lo que es necesario afirmar la presencia de la mujer en el liderazgo empresarial venciendo la natural resistencia a abrirles paso en estructuras tradicionalmente reservadas al otro sexo. Hemos dado significativos pasos hacia adelante en el sector público colocando a mujeres tantos como autoridades, cuanto como ejecutivas en empresas y dependencias del Estado, asegura la alta funcionaria. Y lo más notable es que la diferencia en la retribución de hombres y mujeres se está nivelando, haciendo desaparecer las desigualdades discriminantes.
Los directorios están integrados con mujeres en sectores y actividades que eran impensables hace poco y se están notando los grandes cambios. La meta es llegar al 50%, aunque hoy en día se tiene un 44% de mujeres en las empresas que administra el Estado, aunque la integración se ha dado más en algunos rubros que en otros, al punto que Suecia es considerada la Número Uno a nivel mundial, según el Foro Económico “Gender Index” que reconoce los cambios realizados y los que están en camino.
Se puede apreciar que para estimular nuevos nacimientos, las empresas y el Estado han dictado normas que permiten a los papás y a las mamás dividir su tiempo en la atención de los niños sin que sufran por ello, grandes descuentos de sus salarios, especialmente en el primer año de vida de los recién nacidos, nos estamos refiriendo a parejas en puestos directrizes. Las medidas estimulantes se han dado al permitir un mayor número de empresas organizadas y administradas por mujeres, o facilitando su participación como accionistas en sociedad anónimas, cooperativas u otras formas empresariales.
Nobleza obliga a reconocer que en el sector privado con representación en la bolsa de valores se notó una baja del 34% al 28% en cosa de cuatro años. Quizá por ello el sector público ha venido reclutando mujeres para los altos puestos de dirección de sus unidades de trabajo y administrativos con resultados halagadores según estadísticas recientes, que marcan cifras de mejor rendimiento y eficiencia gerencial, quién lo hubiera podido creer y es que la mujer se ha venido superando, tanto en su formación como en el desempeño de tareas ejecutivas. Lo saludable es el nuevo impulso que universidades e instituciones como “Women to the top” han asumido al lanzar programas de formación y especialización que están funcionando a toda máquina. He ahí un modelo que debería ser imitado y adaptado a nuestra realidad!
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